jueves, 30 de julio de 2009

QUE SUERTE TIENEN LOS ESTUDIANTES




Recuerdo con nostalgia los tiempos de estudiante....Los lustros se han encaprichado en hacerme peinar canas. Parece que fue ayer cuando estaba con las Cuevas de Platón y las sombras de la Hoguera que nos intentaba hacer comprender el gran filosofo D. Miguel Cobaleda.

Atras quedaron esos años de romanticismo estudiantil. Las fiestas de los pueblos y las rivalidades por ser el que mas cargados tomaba los cubatas
Una cosa que me ipresionó cuando llegó la etapa universitaría, fueron los "pisos de estudiantes".
Era la época del "todo vale". Recuerdo televisores en blanco y negro, colchones de lana apolillada, camastros de forja niquelada, y camillas con faldillas para arropar el calor de los braseros con mas de una resistencia achicharrada.
Lo del microondas y la vitro, no se veía ni en los catálogos del PRYCA.
Los calentadores de agua con la bombona de butano, a los que tenias que meter el canuto de papel encendido a la vez que habrias la ruleta del gas.
Eran épocas , en que por compartir, compartias hasta la estufa de butano, que se ponía en el fondo del pasillo con las puertas de los dormitorios entreabiertas para que el reparto del calor fuese equitativo.
En fín toda una odisea.
Ahora, los tiempos han cambiado, y se ofertan pisos de estudiantes que son auténticos hoteles.
Reconozco que me daría pereza tener que volver a memorizar los atlas de anatomia y la bioquímica de Battaner, pero viendo los pisos que te "brindan", te entra el gusanillo.

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